En los últimos meses hemos podido vivir un proceso inédito en nuestro territorio: la activación de grandes procesos participativos para codiseñar con la ciudadanía el futuro de sus municipios. Desde que en diciembre de 2021 el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana asignara fondos europeos Next Generation a ciento veintiún ciudades seleccionadas como piloto para llevar a cabo sus Agendas Urbanas, las ciudades de todo el territorio español han volcado sus esfuerzos en el diseño de estas estrategias que han supuesto un cambio de paradigma en cuanto a procesos de diseño colaborativos, ya que aportan financiación para algo determinante cuando reflexionamos sobre contextos urbanos: la participación ciudadana.
EuroVértice colaboró con ocho municipios para conseguir ser proyectos piloto. Esta financiación ha supuesto un gran impulso para estos Ayuntamientos, que ahora cuentan con una hoja de ruta hacia la que orientaran las políticas urbano-territoriales para conseguir un futuro más sostenible, inclusivo e innovador en 2030. Este proceso ha implicado que más de 7500 ciudadanos hayan podido intervenir en las casi 200 actividades participativas llevadas a cabo por nuestra empresa para la elaboración de su Agenda Urbana Piloto.
Este proyecto ha iniciado un nuevo dialogo entre la administración municipal y la ciudadanía a través de nuevos canales de trabajo que buscan refutar el modelo de participación relegada a la información pública. La participación ciudadana está presente en la Agenda Urbana Española. Este documento recoge un decálogo de objetivos, entre los que está asegurar la participación vecinal, la transparencia y favorecer la gobernanza. Y es que la forma de organización social del sistema democrático español atribuye el poder al conjunto de la ciudadanía, estando garantizada en la Constitución Española su derecho a participar en los asuntos públicos. Por ende, se ha dado gran protagonismo a la participación no solo de los ciudadanos, sino también de técnicos, empleados y corporación municipal en todas las fases del proceso de elaboración del documento.
Han sido unos meses muy ajetreados, donde se han llevado a cabo numerosas actividades participativas en cada municipio desde el diagnóstico del territorio a la redacción del Plan de Acción. Estas han abarcando múltiples grupos de edad, diversidad de género o clase social y han sido siempre consensuadas con el grupo de coordinación de cada ayuntamiento. Para cubrir las diferentes fases, se diseñó una metodología participativa flexible adaptada a las diferentes etapas de trabajo: diseño de las herramientas de participación según el público objetivo; realización de las actividades en cada fase, integrándose en la programación municipal; e incorporación de los resultados obtenidos al documento final. Para este fin se ha conformado un «grupo motor» en cada municipio integrado por vecinos no necesariamente organizados y por personal técnico, para colaborar de manera voluntaria en la elaboración de la Agenda Urbana.
Las actividades de participación han sido muy variadas, y han tenido siempre el objetivo de hacer protagonistas a todas las personas de su municipio para vincularlas al proceso de diseño de ciudad. Además, se han propuesto actividades un poco diferentes e innovadoras para atraer a más público, trabajando con dinámicas de codiseño y propuestas más lúdicas y familiares con el objetivo de ser más atractivas.
Os contamos a continuación un pequeño resumen de todas esas actividades que han servido para llenarnos de experiencia, y aprender mucho de los mas expertos en ciudades: las personas.
Por un lado, se ha visibilizado el trabajo de la Agenda Urbana entre la población a través de oficinas itinerantes que actuaban como un punto de información presencial y recogida de sugerencias mediante un buzón, encuestas de generación de ideas o validación de actuaciones y reparto de kits ciudadanos como obsequio a los participantes y herramienta de recogida de información. La oficina ciudadana ha sido diseñada como una herramienta para acercarse un poquito más a todo el mundo, tratar de divulgar y a la vez inspirar.
Por otro lado, se ha trabajado de manera activa con la ciudadanía y otros colectivos urbanos. Con este propósito se han llevado a cabo diversos talleres o mesas de trabajo según las necesidades de cada municipio, siempre buscando implicar al mayor número de colectivos en un formato de trabajo diferente: los laboratorios de trabajo. Estos laboratorios trabajaban de manera dinámica muchas cuestiones y en este sentido se han realizado talleres de visión compartida, de diseño sobre temas específicos y de validación de propuestas, entre otros, acudiendo para ello a los centros de actividad social por todo el territorio. Asimismo, se sucedieron otro tipo de actividades como mapeos colectivos, centrados en ámbitos concretos como la renaturalización de la ciudad o los equipamientos públicos. Además, hubo actividades más lúdicas o vinculadas con eventos culturales como yincanas musicales o familiares, cafés-coloquio o paseos vecinales donde observar, escuchar y compartir ideas de propuesta y mejora del entorno. Al mismo tiempo, se ha buscado incorporar la visión de los más pequeños, como habitantes futuros del municipio, por lo que se acudió a los centros educativos o escuelas de verano a explicarles los objetivos de la Agenda Urbana a través de dinámicas infantiles, dibujos y un cuaderno de compromiso.
Por último, se han diseñado distintas actividades formativas tanto para los técnicos y responsables municipales, como para los grupos políticos y abiertas a la ciudadanía para instruirles en temas relacionados con la Agenda Urbana.
Una de las claves del proceso que hemos realizado es que nuestros equipos de trabajo han formado parte del diseño de la participación y del diseño del plan paralelamente. Todas las actividades realizadas estaban dinamizadas por consultores que igualmente han redactado las líneas estratégicas conjuntamente. Esto ha permito que el trabajo sea fluido y coherente. Todo lo que acontecía en las diferentes actividades ha sido volcado en los documentos. Los planes de acción de las Agendas Urbanas de estos municipios han sido íntegramente diseñados por la ciudadanía. En EuroVértice hemos facilitado este proceso, alineando las propuestas con los objetivos de la Agenda Urbana Española. Pero la ciudadanía ha sido la protagonista de un proceso emocionante y único donde el trabajo colaborativo ha sido clave. Gracias a todos esos miles de personas que han acudido a todas las propuestas, respondiendo de una manera comprometida.
Tras estos nueve meses de duro trabajo, hemos analizado y reflexionado para aprender y sacar algunas conclusiones que ahora compartimos. Los procesos participativos acaecidos han conseguido aportar una visión global y compartida de cada territorio, incorporando al documento la opinión de quienes realmente los habitan. Se ha puesto de manifiesto la gran voluntad de los vecinos de hacer de sus municipios un lugar mejor y capaz de explotar su potencial en beneficio de todos sus habitantes. Debemos agradecer, por tanto, el alto grado de colaboración de la ciudadanía y personal municipal que ha participado en la concepción de estos documentos, cuya vinculación no ha finalizado aquí, sino que sigue siendo clave en el proceso de implementación. Con este fin, se han dispuesto distintas herramientas de gobernanza y un observatorio de indicadores que garantiza el seguimiento de las medidas recogidas en los próximos ocho años. Además de colaborar en la redacción de los planes, la ciudadanía colaborará en el seguimiento de dichos planes, vigilando que todo cumpla con lo establecido. Esta muestra de interés de la ciudadanía por informarse, intervenir y decidir en los asuntos públicos que les conciernen demuestra que el futuro de los municipios pasa por seguir implicándoles en próximos planes de acción en busca de documentos territoriales más consensuados, más transparentes, más adaptados a las necesidades reales, más participados y, en definitiva, más humanos.
Continuará…
